¿Qué es el síndrome de la mujer maravilla? O como solemos decir en México: una chucha cuerera; término que usamos para referirnos a las personas capaces de resolver cualquier problema que se les ponga enfrente.
Y más allá del problema de la igualdad de género, me quiero centrar en las exigencias hacia las mujeres sobre cómo debemos comportarnos.
Actualmente las cosas han cambiado. Ahora no es raro que la mujer sea la principal proveedora en el hogar; ahora socialmente se le pide que trabaje y sea exitosa, pero también que esté casada con hijos y sea buena madre; que sea guapa, inteligente y buena amante.
Lo trágico viene cuando una misma sucumbe a las exigencias y creemos que debemos ser buenas en todo para ser valiosas.
Cuando eso sucede, te está dando el Síndrome de la mujer maravilla. Recordemos que en el cómic, la mujer maravilla (luego de que conoce a Trevor, un piloto estadounidense) decide luchar por la paz, el amor y la igualdad de género. Y además, ella no necesita ayuda, Diana (la mujer maravilla) siempre se salva por sí misma sin necesidad de la intervención de terceros.
Y así nosotras nos volvemos todas unas chuchitas cuereras tomando como misión de vida ser buenas en todo y para todo.
No hay nada de malo en esforzarse por tener logros y ayudar, sin embargo, pretender ser buena en todo genera un estrés excesivo y mucho agotamiento.
En el fondo, una persona que quiere controlar todo y ser perfecta tiene grandes inseguridades, pues se cree insuficiente como persona y, además, piensa que necesita tener todo controlado y ser la mejor en todo para así demostrar lo valiosa que es.